El estrés de los exámenes y biopsias puede ser innecesario según nuevo estudio.
Foto: Cancerinfo
El consejo anterior dado por el grupo de trabajo de servicios preventivos de Estados Unidos era hacerse chequeos periódicos (mamografías) a partir de los 40 años. Ahora, el mismo grupo recomienda postergar diez años esa medida.
El nuevo enfoque, que contradice una política llevada a cabo por años, trata de reducir el riesgo de "sobretratamiento" y "sobrediagnóstico" del cáncer de mama. La nueva pauta también recomienda que las mujeres entre 50 y 74 años se hagan mamografías con menos frecuencia (una al año, no dos).
Estas recomendaciones han provocado controversia entre los profesionales de la salud, que están habituados a recomendar lo contrario. Sin embargo, Diana Petitti, del grupo de prevención, ha defendido la medida diciendo que se basa en un cuidado análisis de la información disponible.
Los riesgos de hacerse mamografías cuando no son necesarias tiene que ver con someterse a biopsias que resultan negativas y afrontar cuadros de extrema ansiedad. Algunos cánceres de mama crecen tan lentamente que realmente no ponen en riesgo la vida de la paciente, por lo que no necesitan ser tratados.
"Entiendo que el nuevo enfoque -ha dicho Petitti- sorprenda a muchas mujeres, pero ellas tienen que entender que la recomendación es científica, basada en datos reales".
Sin embargo prestigiosas instituciones como la Sociedad Norteamericana del Cáncer y el Colegio Estadounidense de radiología han rechazado la propuesta y siguen recomendando hacerse mamografías a partir de los 40 años.
Otros grupos como la Coalición contra el cáncer de mama y similares han aplaudido las nuevas recomendaciones. Fran Visco, de la coalición, ha dicho "Esta es una gran oportunidad para mirar más allá de las emociones". Otra gente piensa que mientras más temprana es la detección del cáncer de mama más oportunidades hay de curarse.
La recomendación, sin embargo, se basa en nuevos datos conseguidos por estudios hechos en Inglaterra y Suiza. Esa data fue dada a seis grupos especializados para que hagan modelos estadísticos que los ayuden a tomar la decisión correcta. Esta medida, que es controversial en EEUU, es la norma en la Comunidad Europea.
Otros analistas están preocupados ya que se puede interpretar que esta nueva política sea un intento de la administración Obama para ahorrarse dinero de la salud pública. Sin embargo los que defienden las nuevas recomendaciones insisten en señalar que las principales beneficiarias serán las mujeres.
Información de NY Times. Versión, edición y traducción de Sophimanía
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