jueves, 2 de octubre de 2008

Comer pescado y dar de lactar más tiempo impulsa el mejor desarrollo de infantes


Omega-3: del pescado al cerebro del niño. Foto: Internet

Mayor consumo de pescado en madres embarazadas y un período largo de lactancia del niño tienen conexión con un mejor desarrollo cognitivo y físico de los infantes, según un nuevo estudio.
La investigación se hizo en Dinamarca sobre 25,446 niños nacidos entre 1997 and 2002, encontró que los niños cuyas madres comieron más pescado durante el embarazo (un promedio de 2 onzas diarias) tenían, a los 18 meses, mejores habilidades motoras y cognitivas que aquellos cuyas madres comieron menos pescado. Los niños amamantados por períodos más largos, también mostraron mejor desarrollo a los 18 meses. La leche materna también tiene omega-3.
Esto confirma que la grasa omega-3 del pesacdo y los compuestos de la leche materna ayudan al desarrollo del infante. “Estos resultados, junto con otros estudios en EEUU y el Reino Unido, muestran que un consumo moderado de pescado durante el embarazo no daña el desarrollo del niño y por el contrario, al final, lo beneficiaría” dijo el investigador principal Emily Oken, profesor asistente de la Universidad de Harvard. El estudio se publicó en el American Journal of Clinical Nutrition

Dar de lactar más tiempo solo beneficia
al niño. Foto: Internet
Aunque muchas mujeres embarazadas consumen menos pescado durante el embarazo debido a los rastros de mercurio en ellos, que se sabe es tóxico, lo recomendable es optar por pescados que no contienen altas cantidades de mercurio, como hicieron las mujeres en este estudio. Esos pescados son: salmón, bacalao, caballa o arenque.

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