Fumar una mala costumbre, especialmente en
embarazadas. Foto: Irishhealth.com
Por cada cigarrillo que una mujer embarazada fuma al día, aumenta en un cinco por ciento el riesgo de que su futuro hijo sufra estrabismo, sobre todo en los meses finales de la gestación.
El estrabismo es una condición que afecta entre el 2 y 3% de los niños, pero no se sabe mucho sobre sus causas. Tras ese nombre se catalogan unos 30 desórdenes que impiden que ambos ojos se alinien en la misma dirección.
Algunos cuadros se deben a problemas musculares y otros a daños en los nervios. Cuando no es corregido puede provocar daño irreversible en la visión, así como problemas sicológicos debido a que socialmente es objeto de burlas y señalamientos, especialmente en los colegios.
Ahora se sabe que la nicotina puede ser una causa de estrabismo. "La nicotina y otras sustancias como el alcohol y la cafeína tienen efectos sobre el cerebro -dice el doctor Tobias Torp-Pedersen que guió el estudio en Copenhaguen- disturbios menores pueden provocar en el cerebro en formación mayor riesgo de estrabismo".
Su equipo descubrió que las mujeres que fuman durante el embarazo tienen 26 por ciento más riesgo de tener un hijo con estrabismo que madres de la misma edad que no fuman. El mismo estudio determinó que las mujeres que fuman entre cinco y nueve cigarrillos aumentan en 38 por ciento el mismo riesgo respecto de las no fumadoras.
¿La solución? Tan simple como dejar de fumar.
Información de Reuters. Versión, edicion y traducción de Sophimanía
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